Perseverancia en medio de la Adversidad

Mas el que persevere hasta el fin este será salvo.

San Mateo 24:13

Inmediatamente que terminé de caminar recibí un mensaje que decía !Bien, tu perseverancia es admirable!  Llegue a la meta y la felicitación fue muy bien aceptada. Más el que persevere hasta el fin, este será salvo. La palabra de Dios es tan segura y este mensaje es tan real, es entregado a todo el pueblo de Dios para que marche confiando en una promesa de salvación eterna, esta promesa es aceptada por los que recibimos a Jesucristo como nuestro Salvador y Señor.

La perseverancia es el esfuerzo continuo para alcanzar la promesa de Dios, enfrentar las situaciones difíciles que surgen en nuestra vida con valor y fe. Cuando Jesús dijo estas palabras estaba en el monte los Olivos y los discípulos se le acercaron aparte diciendo: Dinos, ¿Cuándo serán estas cosas, y que señal habrá de tu venida, Y del fin del siglo? Jesús inmediatamente respondió a sus discípulos diciendo que vendrían engañadores, guerras y rumores de guerras, pestes y hambres, y terremotos en diferentes lugares. Jesús aseguro que eso solo es principio de dolores pero aun no es el fin.  Tomando en cuenta que Jesús afirmo que habrían pestes y de acuerdo a la historia de salud en el mundo se han registrado muchas epidemias y pandemias que han azotado a la humanidad llevando a millones de personas al fin de su vida. De la misma manera en el año 2019 la Organización mundial de la Salud alertó el riesgo que se produjera una pandemia global, así al fin del año apareció el nuevo coronavirus pandemia que en 2020 está contagiando a millones de personas y cobrado la vida de miles, sin importar edad, color, posición económica, vida religiosa y status social. Esta crisis produce sufrimiento a muchos, el efecto del propio virus en su cuerpo, la soledad por la separación de sus seres queridos, el cansancio en el afán por hacer lo mejor a sus pacientes, cada uno en lo que le corresponde hacer, siente el impacto en su propia vida. Es aquí donde se necesita perseverancia, para los que sufren la enfermedad, los que necesitan consuelo, y para los que realizan la labor de sanidad física, psicológica y espiritual.

¿Qué nos corresponde hacer a todos? Ser obedientes, aceptar recibir y practicar el mensaje de nuestro Señor Jesucristo dado a los discípulos, pero extendido a la iglesia de nuestro tiempo. Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo. Para perseverar es necesario mantener una buena relación con Dios alimentándonos por medio de: 1. La oración. 2. Por medio de la lectura y meditación diaria de la palabra de Dios. Si perseveramos en la palabra no ignoramos cada acontecimiento que se aproxima.               3. Permaneciendo firmes y constantes en la fe aun en medio de las adversidades de las cuales únicamente Dios tiene el control. Día a día debemos recordar que Dios es soberano y nos pide permanecer fielmente acatando sus mandamientos. La perseverancia nos guía a la eternidad y nos permite ser herederos de las promesas de Dios y de todo lo maravilloso que él ha preparado para sus fieles. 

La gracia de Dios nos guarde y nos encamine en la perseverancia hasta el fin de nuestra vida y nos diga estas palabras: Bien buen siervo y fiel, sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré, entra en el gozo de tu Señor.

Por: Hna. María Félix Cárcamo de Sánchez

Pastora de Junta Anual Amigos de Honduras